El huracán José fue una tormenta tropical que se gestó a finales del mes de agosto del 2017 en el Atlántico y que al trascurrir el mes de septiembre, fue viajando por distintas islas cercanas, causando estragos; además, de acompañar a otros huracanes como Irma, María y Katia.
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Trayectoria del huracán José
El huracán José tiene su origen a finales del mes de agosto del año 2017, naciendo como una onda tropical en la costa Occidental de África. Se hizo acompañar con fuertes y feroces vientos visitando a la Isla de Barbuda, que ya había sufrido y estaba desolada por las calamidades antes de girar su trayectoria.
Entonces el huracán José fue para el momento, en la historia de los fenómenos naturales, el ciclón tropical que destruyó las Bermudas y las Bahamas. Se caracterizó por ser la décima tormenta, el quinto huracán y el tercer huracán con más fuerza, de la temporada de los huracanes que transcurrieron por el Atlántico durante todo el año 2017. (Ver Artículo: El huracán mas fuerte de la historia)
Durante este año y en la historia que describe al Atlántico, es la primera vez que dos huracanes en pleno desarrollo hacen su encuentro al mismo tiempo y que registraban una velocidad aproximada de 155 millas por hora, es decir 255 kilómetros por hora.
Para comenzar a describir la trayectoria que tuvo el huracán José, es necesario establecer lo siguiente:
El día 2 de septiembre, la onda tropical transitó por el sur de Cabo Verde con fuertes tormentas desordenadas. A pesar de la naturaleza del fenómeno natural y de las condiciones ambientales, el Centro Nacional de Huracanes pudo llevar un estrecho seguimiento.
Para el día 5 de septiembre, el huracán ya se había consolidado y estaba generando fuertes vientos que ya se comenzaban a transformar en una tormenta tropical.
Para ese día el Centro de Nacional de Huracanes, siendo las 15:00 UTC, calificó a la tormenta tropical como huracán José, recorriendo unas 1.420 millas, es decir 1.450 kilómetros al este de las Antillas Menores.
El huracán José se incrementa paulatinamente en un entorno beneficioso de las temperaturas de agua caliente, disminuyendo la cizalladura, que quiere decir el corte del viento, y con suficiente humedad ambiental.
Siendo el día 6 de septiembre, la tormenta tropical se desenvolvió como si fuera un ojo y con un movimiento circular simétrico, que continuaba la ruta del oeste-noroeste, dirigida por una dominante cresta subtropical. Siendo las 21:00 UTC, el Centro Nacional de Huracanes, lo confirmó en categoría de huracán.
Mientras la información se confirmaba, el huracán José se juntaba con los huracanes Irma y Katia, que por primera vez en la historia del Atlántico, se hicieron presentes.
Para el día 8 de septiembre, el gobierno y las autoridades realizan las gestiones para evacuar completamente la Isla antes del paso anticipado del aterrador huracán José. (Ver Artículo: Huracán Irene)
Los vientos que dirigían el huracán José, llegaron a alcanzar una velocidad de 240 kilómetros por hora, por lo que se clasificó a la tormenta en categoría 4, dentro de la escala que descifra al fenómeno natural de los huracanes, siendo su máximo nivel 5.
Justo en ese momento, la tormenta se hallaba a unos 700 kilómetros al sudeste de las islas del Caribe que habían sido castigadas por el huracán Irma.
El huracán José, se estaba trasladando al noroeste con una velocidad de 30 kilómetros por hora.
Para ese entonces, se instalaron nueve refugios en Barbuda, donde alojaron aproximadamente a 17.000 personas, entre mujeres e infantes, los habitantes de San Martín, hacían lo posible por escapar de la isla, quedando solamente los hombres.
Pero con algo de suerte, el huracán José permaneció distante de la costa de las Antillas Menores, y apenas en Antigua y Barbuda.
Para el día 9 de septiembre, el huracán José, ya había logrado vientos aterradores de 250 kilómetros por hora, registrándose por primera vez la existencia de dos huracanes que se hicieran presente de forma simultánea en el Atlántico, produciendo vientos con velocidades aproximadas a 150 millas por hora.
El día 10 de septiembre, el huracán José disminuye la categoría registrándose a 3, y de inmediato pasa a categoría 2.
Al llegar el día 14 de septiembre, la tormenta tropical José, a partir de las 11 de la mañana, se ubicó a 30 millas náuticas de 24.9, -66.6, a una distancia de 700 kilómetros al este-noroeste de las Bahamas y 840 kilómetros al sur-suroeste de las Bermudas.
Los fuertes vientos se encontraban en 60 nudos, es decir en 110 kilómetros por hora, y con una categoría de 1 en la escala de Saffir-Simpson, con fuertes ráfagas de 85 nudos, lo que traduce a 160 kilómetros por hora.
La presión barométrica, es decir la presión que ejerce el viento sobre una superficie, la mínima se encontraba en 989 milibares, que se refiere a una unidad de presión equivalente a una milésima parte del bar. (Ver Artículo: Temporada de huracán del 2018)
El huracán se traslada al oeste-noroeste a una velocidad de 6 nudos, es decir 11 kilómetros por hora. Los fuertes vientos que trae el huracán, se expanden hasta 20 millas náuticas, es decir 35 kilómetros, del centro de José, y los vientos cada vez arreciaban su fuerza de tormenta tropical expandiéndose a 100 millas náuticas, lo que traduce 185 kilómetros.
El feroz huracán José atemorizó a las Antillas Menores, tan sólo a pocos días de haber padecido la desastrosa visita del huracán Irma, muy particularmente a Barbuda, que fue devastada en un 95% tras el paso del huracán Irma.
Las autoridades del gobierno, tomaron la decisión de cerrar momentáneamente el acceso al Aeropuerto Internacional de Nassau y giraron instrucciones de desalojar las islas más vulnerables del país.
Para el 15 de septiembre, se hacía difícil predecir el estado en que se encontraría la atmósfera. El transcurrir del huracán José, dependía de la ruta que había dejado el huracán Irma.
El huracán José, comienza a debilitarse en su rumbo al este de acuerdo a los estudios meteorológicos, evidenciaron una transformación del huracán José al paso por las aguas del Atlántico norte, lo que lo alejaría de las costas de La Florida.
Finalmente, el destino del huracán José al norte, se convierte en incierto, motivado a que las aguas del océano, son menos cálidas y los vientos cada vez más helados, lo que no contribuía a que el fenómeno natural con características dañinas tomara fuerzas y se fortaleciera.
Huracán Irma y José
El huracán Irma comienza a gestarse el 30 de agosto en las proximidades de las islas de Cabo Verde, desde su inicio con una onda tropical se había traslado por la costa oeste de África tres días antes.
Las condiciones climáticas beneficiaban al huracán Irma para que recobrara gran fuerza y se intensificara enérgicamente luego de su creación, lo que lo transformó en un huracán de categoría 2, dentro de la escala de huracanes de Saffir-Simpson, en un tiempo corto de 24 horas.
Inmediatamente el huracán Irma se transforma en un huracán de categoría 3, aunque la intensidad oscilaba entre las categorías de 2 y 3 durante los siguientes días.
El huracán Irma se convirtió en un temible ciclón, que llegó a alcanzar la categoría 5 en la escala de Saffir-Simpson, que se refiere al nivel más alto; llegó a Puerto Rico, luego de visitar a las Islas Vírgenes. El poderoso ciclón, tocó tierra en Barbuda, ocasionando significativos desastres al transcurrir por distintas islas del Caribe.
Las consecuencias de este devastador fenómeno natural se hicieron sentir a 85 kilómetros circundantes del ojo de Irma, conocido como uno de los huracanes más poderosos que se hayan registrado en el Atlántico.
El Centro Nacional de Huracanes, clasifica al huracán Irma, como un fuerte y desastroso ciclón tropical, el más enérgico que pudiera observarse en el Atlántico, que haya ocurrido desde el año 2005.
Se conoció como el primer huracán que alcanzará la categoría 5 y que afectó las Islas de Sotavento, registrado como el huracán que resultara con gastos más costosos para el Caribe.
Para el día 6 de septiembre, el huracán Irma logró obtener su máxima velocidad en vientos de 285 kilómetros por hora y una presión mínima de 914 hPa, se clasificó en el segundo ciclón tropical más violento que atravesaría el Atlántico durante la temporada de huracanes del año 2017.
El huracán Irma, luego de bajar de categoría a 3 por su contacto con la tierra, se acrecentó a categoría 4 al atravesar las aguas cálidas entre Cuba y Florida, mucho antes de hacer contacto con el territorio de Cudjoe Key tenía unos vientos máximos de 215 kilómetros por hora.
El temible huracán Irma, hace su entrada a Florida en la Marco Island, retomando la categoría de 3. De manera instantánea, Irma se disminuye a un huracán en categoría 2, y para el 16 de septiembre se esfuma frente a la costa de Nueva Inglaterra.
Durante su paso y estadía, el ciclón ocasionó calamidades dramáticas en Barbuda, San Bartolomé, San Martín, Anguila y las Islas Vírgenes, alcanzando una categoría de 5.
Según los reportes oficiales, las cifras de personas fallecidas a causa de lo catastrófico que representó ser el huracán Irma, se cuentan en la cantidad aproximada de 135 personas. Se conoce este ciclón tropical, como uno de los fenómenos naturales más catastróficos que haya presenciado el año 2017.
Mientras, que el huracán Irma hacia su visita por los distintos lugares devastando todo lo que encontraba a su paso, el huracán José se comportaba con vientos de 250 kilómetros por hora, que igualmente pudo ser catalogado en categoría 5 y que de acuerdo a los estudios realizados por los expertos del Centro Nacional de Huracanes de los Estados Unidos de América, había llegado con una actividad más fuerte de lo que se aguardaba.
El gobierno conjuntamente con sus autoridades, habían reportado que el 90% de Barbuda, quedó destruido por el paso del huracán Irma, por lo que el huracán José, terminaría finalmente con todo lo que había quedado en buenas condiciones.
Pasados los días, ya siendo el 6 de septiembre la simple onda tropical, se transformó en un azotador huracán. Su comienzo, fue impactando a las Antillas, territorio que ya había sido lastimado por el paso del huracán Irma.
https://youtu.be/uKiDa75RRbk
El huracán José alcanzó la categoría 4 transformándose en un furioso y devastador ciclón que lo acompañaban en su travesía fuertes vientos hasta de 250 kilómetros por hora.
A consecuencia de la travesía del huracán José, las marejadas producidas por este fenómeno natural, afectaron significativamente a las Bermudas, las Bahamas, las costas norte de La Española y Puerto Rico, al igual que la costa suroeste de los Estados Unidos.
La cercanía del huracán José, a las costas noroeste de Estados Unidos, produjo enérgicas marejadas a las playas, así como lluvias en distintas regiones costeras, incluyendo la ciudad de Nueva York. Las grandes olas ocasionaron situación de resacas y corrientes marinas peligrosas.
Sin embargo, la existencia del huracán José, se vio debilitada a causa de que las aguas del océano eran poco cálidas y los vientos helados no le permitieron continuar con su paso.
Huracán José y María
Curiosamente existieron en un mismo momento dos fenómenos naturales caracterizados como huracanes que cruzaron el Atlántico y cada uno poseía una gran fuerza devastadora para el ambiente y la humanidad, sus nombres José y María, representan grandes y respetuosos personajes que se encuentran plasmados en las santas escrituras.
Por coincidencia, la travesía de estos dos huracanes conocidos como José y María, en algún momento de su viaje podrían encontrarse uno con el otro, a causa de los fuertes vientos, y que según lo vaticinaban el Centro Nacional de Huracanes, manifestaban que si este hecho se consolidaba, quizás podría ser el final del mundo.
Como dato curioso, de acuerdo a las teorías de algunos expertos en huracanes, afirmaban que este acontecimiento se debía a que justo cuando aparecieron los dos huracanes, era el día equinoccial de las constelaciones de los signos de Virgo, Leo, y de los astros el Sol y la Luna, que se encontraban alineados, y que según significaba para algunos estudiosos en la materia, se trataba de la segunda llegada de Jesucristo.
Se observaba desde el firmamento, en la costa este de Estados Unidos en la parte de arriba al huracán José y en las Antillas Menores, en la parte inferior se observaba al huracán María.
El huracán José comenzó en categoría 1 y se localizaba a unos 750 kilómetros al sureste del Cabo Hatteras, Carolina del Norte, en Estados Unidos, y a una distancia de 750 kilómetros al oeste-suroeste de Bermuda.
Para ese momento, el huracán José contaba con vientos sostenidos de 128 kilómetros por hora y el Centro Nacional de Huracanes tenía previsto que incrementaría su actividad al pasar las horas.
Lo que no se puede dejar de mencionar, es que el huracán José estuvo varios días rondando el Atlántico, cuando finalmente se transformó en la décima tormenta tropical que se generaba durante la temporada de huracanes.
El huracán José obtuvo la categoría 4 y poco a poco se fue desvaneciendo y siguiendo su travesía hacia el norte cuando permanecía siendo un huracán, más tarde descendió su categoría y fue atrapado por el huracán María.
Mientras tanto, aparece el huracán María considerado como la tormenta tropical designada con el número 15, dentro de los fenómenos naturales que ocurrían en esa temporada. Este huracán se formó con gran rapidez, se hizo acompañar con gigantescos y fuertes vientos con más de 175 millas por hora, que pasadas las pocas horas alcanzó la máxima categoría de 5.
El fenómeno natural, conocido como el huracán María, se cuenta que fue uno de los acontecimientos naturales más devastadores que azotaron a Dominica y Puerto Rico.
Se registró como el décimo huracán más poderoso en la cuenca del Atlántico, y el huracán más terrible dentro de los huracanes que existieron en el 2017. Fue el octavo huracán de manera consecutiva, el cuarto huracán considerado como mayor, el segundo en la categoría 5, y el más destructor.
Cuando se encontraba en la cúspide de su actividad, el huracán María ocasionó incontables catástrofes y generó terribles daños por todo el noroeste del Caribe, que cuando las autoridades se encontraban en plena recuperación de la isla de Sotavento a causa de los desastres del huracán Irma, se apareció interrumpiendo frenéticamente las acciones de reparación del territorio.
El huracán María se clasificó como el tercer y consecutivo huracán que afectara las islas de Sotavento en tan sólo dos semanas. Este huracán se originó a causa de una onda tropical y luego a mediados del mes de septiembre se trasformó en una tormenta tropical llegando a las Antillas Menores.
Siendo el día 13 de septiembre el Centro Nacional de Huracanes, inicia su proceso de verificar los dos fenómenos naturales que se desarrollaban en el Atlántico.
Para el día 16 de septiembre, el Centro Nacional de Huracanes ya había declarado a las tormentas como potentes huracanes, denominando a uno de éstos con el nombre de María.
Siendo el 17 de septiembre, los cazadores de huracanes se dedicaron a investigar la tormenta tropical, donde confirman que María se inicia en un tiempo fuerte de intensificación veloz, haciéndose acompañar de fuertes vientos que se incrementaban de 180 a 250 mph (millas por hora), en tan corto tiempo de doce horas, y la presión disminuía a 856 mbar (unidad de presión equivalente a una milésima parte del bar).
El día 18 de septiembre, el huracán María se ubicó entre las 15 millas, a unos 70 kilómetros al este-suroeste de Dominica y a unas 35 millas, 55 kilómetros al noreste de Martinica.
Los fuertes vientos se encontraban de 115 nudos, es decir 215 kilómetros por hora, en una categoría 4 en la escala de Saffir-Simpson, con ráfagas que se sentían aproximadamente de 140 nudos, es decir 260 kilómetros por hora.
Muchos investigadores en el tema de huracanes, clasificaron al huracán María como categoría 5, tomando en consideración los fuertes vientos y la ruta por el Caribe, al igual que los destrozos causados.
Huracán José y Katia
La travesía del huracán José, se dirige hacia las aguas abiertas del Atlántico y una vez encontrándose en esta zona va desvaneciendo sus fuerzas, aunque el seguimiento a este fenómeno natural indica que visitaría a las Bermudas en categoría 1 o 2.
Sin embargo, las autoridades habían alertado a la población de una posible tormenta tropical que pasaría por la zona por un tiempo de 36 horas, haciendo su presencia en las Islas de St. Thomas y St. John, las Islas Vírgenes Británicas, San Martín y San Bartolomé.
Igualmente, se advierte de una tormenta tropical a las poblaciones de Antigua, Barbuda, Anguilla, St. Martin y St. Barthelemy y los avisos por tormenta tropical a Montserrat, San Cristóbal y Nieves, Saba, St. Eustatius, las Islas Vírgenes Británicas y St. Thomas y St. John. El centro del huracán José se estimaba que estuviera muy cerca de las islas al noroeste de las Antillas Menores.
El huracán José, se ubicaba a 1.675 kilómetros de las Antillas Menores, y según los pronósticos podía llegar en cualquier momento, aunque después cambió la ruta al norte de los archipiélagos de Bermudas y Bahamas.
Al mismo tiempo que transcurría el huracán José, también el huracán Katia se mantenía en actividad al Atlántico, iniciándose en categoría 2, y que cada vez se fortalecía y se hacía presente en la costa del Golfo de México.
Los vientos que acompañaban al huracán Katia, se ubicaban en 155 kilómetros por hora, según informaba el Centro Nacional de Huracanes, manteniendo alerta y notificando que se acercaba a la costa mexicana.
Para ese entonces, las autoridades preveían que el huracán tocara tierra en horas nocturnas, mientras que se disminuía a tormenta tropical, y continuaba su ruta al oeste entrando a terrenos mexicanos.
El huracán Katia igualmente contaba con fuertes vientos y con ráfagas elevadas de hasta 120 kilómetros por hora, lo que alertó al estado mexicano de Veracruz, desde Tuxpan a Laguna Verde.
El Centro Nacional de Huracanes informaba que el ciclón tropical se hallaba a 295 kilómetros de Tampico y 300 kilómetros de Veracruz de México, y que se trasladaba hacia el sureste con una velocidad de 6 kilómetros.
Las autoridades y expertos en huracanes preveían que el huracán Katia generara fuertes lluvias de 127 a 254 milímetros sobre el norte de Veracruz, y de 60 a 127 milímetros al sur de Tamaulipas, al noreste de Puebla y al sur de Veracruz.
Se consideraba que las precipitaciones de agua con un máximo de 381 milímetros, representaban una amenaza para las poblaciones y sus habitantes, a causa de desplazamientos de tierra, muy particularmente en zonas montañosas.
Estos dos fenómenos naturales, conocidos como huracanes se suman a la lista de acontecimientos naturales potencialmente como devastadores en la temporada de huracanes que atravesaron el Atlántico.
El huracán José afecta en República Dominicana
En el transcurrir del huracán José, las autoridades de República Dominicana dieron instrucciones de que las zonas sensibles al paso del temible fenómeno natural fueran desalojadas para evitar con sus inundaciones pérdidas humanas y que existieran heridos.
Una de las principales señales de cuidado que presentó el huracán José en República Dominicana, fueron los fuertes oleajes que llegaron a esa nación.
Por lo que el Centro de Operaciones de Emergencia del país decidió incrementar la advertencia de probables inundaciones de manera repentina y fuerte nubosidad sobre el territorio, a causa de la presencia del huracán José.
Las advertencias continuaban presentes en 17 provincias, a causa de posibles crecidas de arroyos y ríos, provocadas por fuertes precipitaciones, relacionadas con la onda tropical.
https://youtu.be/zwzzhQHf_qw
Algunas ciudades se mantenían en alerta ante cualquier efecto causado por el paso del huracán José, tales como: Santiago, Dajabón, Espaillat y en verde Santiago Rodríguez, La Vega, Valverde, Puerto Plata, Montecristi, Monseñor Nouel, El Seibo, La Altagracia, Hato Mayor, La Romana, San José de Ocoa, San Cristóbal, Barahona, San Juan, el Gran Santo Domingo y Azua.
Las autoridades solicitaron a la población que no atravesaran ningún afluente de agua, evitando cualquier situación de alto riesgo.
En las poblaciones de Moca y La Vega, aproximadamente 41 casas fueron devastadas y muchos habitantes fueron desplazados de los lugares a consecuencia de los desbordamientos de los ríos, producidos por las fuertes lluvias.
Igualmente, las autoridades y el Centro de Operaciones de Emergencias, informaron que 276 viviendas fueron destruidas por la onda tropical que cubría el territorio de ese país.
En muchos otros lugares como Palmar Arriba, provincia del norte de Santiago, a causa de la crecida del río Quinigüita, se inundaron por lo menos 41 casas que finalmente fueron devastadas en su totalidad.
Al igual que las bravas aguas del río Moca, que se adentraron en muchos de los barrios existentes en el mismo municipio, generando destrozos de las propiedades y pérdidas totales. El huracán José en su travesía por esta nación dejó como resultado la pérdida de vidas humanas.
De acuerdo a información suministrada por las autoridades, se registraron 11.200 personas que fueron desalojadas de lugares vulnerables; 7.400 turistas fueron llevados a Santo Domingo, muy apartados de zonas turísticas cerca del mar, para resguardarles la vida ante la visita del huracán José.
El huracán José en Cuba
En la isla cubana ante la llegada del huracán José los meteorólogos originalmente no pronosticaron una situación impactante que les afectara directamente.
Las autoridades se dedicaron al resguardo de combustible y se difundió que la provincia de Camaguey garantizaría el suficiente combustible ante posibles cortes de energía eléctrica, a causa de los efectos del huracán.
Defensa Civil desalojó aproximadamente a un millón de habitantes de las zonas bajas, inclusive miles de turistas de origen canadiense y europeo que se encontraban disfrutando en los Jardines del Rey.
Los indefensos delfines, también fueron resguardados en una zona turística conocida como Cayo Guillermo, que fueron traslados en helicópteros, para salvarles la vida, ante cualquier acontecimiento natural catastrófico.
