Mal de montaña: fisiopatología, síntomas, tratamientos, y más

El mal de montaña o mal de altura es una afección que presenta una gran parte de la población. En este artículo te contaremos más sobre este problema de salud, que estamos seguros no conocías.

Mal de Montaña

 Fisiopatología del Mal de montaña

Es importante mencionar que, las montañas cubren una gran parte de la superficie terrestre y por otro lado gran parte de la población ha hecho de altitudes muy altas su lugar de hábitat. En ese sentido, también existe una gran cantidad de personas que viajan anualmente a sitios de altura, con el fin de hacer turismo o practicar alpinismo. Este tipo de personas están en riesgo de padecer el síndrome del Mal de Montaña.

El Mal de Montaña puede causar problemas muy graves a la salud de quien lo padece. Entre sus consecuencias más graves, está la presencia de edemas cerebrales y pulmonares, todos ellos relacionados a la altitud. El Mal de Montaña es un problema que pone en riesgo de la vida de las personas que lo sufren. Cabe destacar que, el Mal de Montaña ocurre cuando las alturas superan los 2500 metros.

Esta afección ocurre cuando una persona se somete a una altura elevada. En ese momento, el cuerpo sufre una reducción de la presión arterial que provoca paralelamente a una disminución de la oxigenación que va a los pulmones. Este cambio provoca que haya menos presión para dirigir la distribución del oxígeno a los alvéolos. De esta manera, el cuerpo produce una respuesta de hiper-ventilación respiratoria con deshidratación.

Durante, el proceso de aclimatación el ascenso a alturas elevadas disminuye la resistencia del organismo al ejercicio y provoca el aumento de las lesiones por frío. Por otra parte, si el ascenso se realiza de forma muy rápida, el cuerpo puede producir hipoxemia, debido al estrés, así como también otros estados patológicos relacionados a las alturas elevadas.

Mal de Montaña

El Mal de Montaña o mal de altura, es un síndrome neurológico que se caracteriza por tener síntomas como dolores de cabeza, náuseas, fatiga y mareos. Generalmente, estos síntomas aparecen 6 o 12 horas después de ascender a grandes altitudes. Te recomendamos que conozcas también sobre el artículo que habla de los Nutrientes del Suelo

Puede ser crónico